«Un liderazgo de confianza y con sentido de propósito es fundamental en estos tiempos»
En el marco de la premiación de Los Mejores Lugares para Trabajar en Chile 2020, entrevistamos a José Antonio Yazigi, Director de Great Place to Work® Chile, para conocer cuáles fueron las principales tendencias del 2020.
Un año de muchos desafíos, pero también de muchos aprendizajes. Así lo describe José Antonio Yazigi, Director de Great Place to Work® Chile, un 2020 en el cual, debido a la pandemia del COVID-19, las organizaciones se vieron en la necesidad de revisar sus políticas y prácticas y enfocarlas en tener una comunicación efectiva y de confianza, donde el sentido de propósito final fuera el cuidado y la salud de los colaboradores.
¿Cómo Great Place to Work® acompañó a sus clientes en la pandemia?
Siempre hemos sido muy cercanos a nuestros clientes. Desde el primer día estuvimos con ellos para saber cuáles eran sus aprehensiones y qué desafíos estaban enfrentando durante este tiempo. Entendiendo esta realidad quisimos hacer un levantamiento de las políticas y prácticas que implementaron las organizaciones en tiempos de COVID-19. Complementariamente, diseñamos una encuesta específica, llamada Pulse COVID-19, que se realizó entre abril y julio, para conocer cuál era la situación de los colaboradores en un momento de tanta incertidumbre y con ello empezar a efectuar acciones pertinentes y responder a esas percepciones.
¿Qué tendencias observaron en las organizaciones a partir de los resultados de su investigación?
Este levantamiento nos ayudó a obtener información sobre lo que estaba pasando en ese momento. El mensaje de parte de los colaboradores, de manera transversal en todas las organizaciones, arrojó una baja pronunciada en la dimensión de equilibrio entre vida personal y laboral. Específicamente en aspectos tales como el manejo del stress, la dificultad de poder organizarse bien y qué rol jugaba la organización, a través de sus líderes, en incentivar un real equilibrio de la vida personal y la laboral.
Frente a esta realidad las organizaciones comenzaron a desarrollar de manera creciente prácticas para incentivar el equilibrio, abordando aspectos relativos a la salud emocional, psicológica y física de los colaboradores. Evidentemente, implementar estas prácticas sin el compromiso de los líderes no habría tenido los efectos positivos que pudimos observar hacia finales del año.
¿Qué características del liderazgo son fundamentales en estos tiempos?
El tipo de liderazgo que se instaló fue uno mucho más cercano, más abierto a la comunicación y con una preocupación genuina por sus colaboradores, sus experiencias y realidades.
Vimos líderes dispuestos a mostrarse vulnerables, humildes y motivados por propósitos mucho mayores que el resultado financiero de sus organizaciones.
Un liderazgo de confianza y con sentido de propósito, donde se priorizó la relación con los colaboradores, demostrando respeto y cuidado por la gente.
¿Qué caracterizó al liderazgo de confianza el 2020?
El liderazgo de confianza el año pasado se hizo visible a través de acciones ejecutadas con decisión y compromiso: comunicando, cuidando y escuchando.
Comunicando el por qué y el cómo de una manera cercana, directa y transparente a los colaboradores. Cuidando a través de una preocupación genuina por los colaboradores y sus familias, siendo empáticos con la realidad que estaban viviendo. Y por sobre todo, escuchando. Estando muy atentos a lo que tenían que decir los colaboradores, implementando diversos canales de escucha para aquello.
De hecho, hemos visto un creciente interés de las organizaciones por participar en nuestro programa de certificación, que es de gran ayuda para incrementar los niveles de escucha. La certificación es un sello distintivo para las organizaciones, es la mejor manera de saber si es que los líderes y la organización van por el camino correcto, si es que de verdad están creando y sosteniendo en el tiempo un liderazgo y una cultura de confianza.
¿Cuáles son los elementos claves para crear una cultura de confianza y cómo se sostiene en el tiempo?
Debe existir una comunicación fluida, constante y frecuente, respeto por el equilibrio de la vida laboral con la personal y un cuidado especial hacia los colaboradores y su bienestar emocional, psicológico y físico.
Es por esto que las organizaciones deben poner especial atención a no quedarse en la observación de lo evidente y lo obvio en cuanto a los beneficios tangibles del trabajo a distancia, como pudiera ser el ahorro asociado a la menor necesidad de espacio inmobiliario, entre otros, porque el verdadero desafío será tener ejecutivos que sean exitosos en las tareas de liderar en esta nueva realidad laboral.
¿Qué diferenció este año a los Mejores Lugares para Trabajar en Chile de otras organizaciones?
Siguiendo con nuestra investigación hacia finales del año pasado, periodo en el cual la gran mayoría de las organizaciones aplicaron nuestra herramienta de escucha, emergen dos pilares con mucha fuerza: un liderazgo con sentido de propósito y participativo, y un orgullo de pertenencia asociado al cuidado de los colaboradores por parte de la empresa.
Además, una de las cosas que nos enseñaron los Mejores Lugares para Trabajar en Chile, es que, para salir adelante, eran necesarias la solidaridad y empatía con todos los actores que componen el día a día: los colaboradores, los clientes, proveedores y la comunidad.
Conoce la percepción de tus colaboradores a través de la encuesta de Great Place To Work®